Texto: Hugo León
“Cualquier abusador en Cuba puede golpear a la mujer que no importa, siempre y cuando no la mande de terapia para un hospital o le ocasione un coma, usted puede seguir abusando de ella y todo queda en simple papeleo”, fue la conclusión de una mujer cubana agredida físicamente por su ex esposo, caso que no trascendió en la policía.
El pasado 4 de enero, Félix Armando Garoz Noguera, trabajador del Grupo Empresarial Constructor del ministerio del Interior (MININT), representante del sindicato y miembro del PCC, golpeó y causó hematomas en distintas zonas del cuerpo, chichones en la cabeza y hematomas en los senos y otras áreas del cuerpo a Dianelys T. Hedz, mujer que hizo la denuncia en Facebook ante el inmovilismo de las autoridades.
Dianelys explicó su caso en dos publicaciones, en la primera de las cuales señaló que fue gracias a sus vecinos que pudieron quitarle al hombre de encima, pues él mide más de 1.80 y es de complexión física fuerte, y ella mide apenas 1.56.
En un primer momento contó que el caso lo manejaba la policía de Aguilera y que el señor estaba moviendo sus influencias para que todo quede como una simple multa administrativa por desorden público, utilizando para esto lo único que ella pudo hacerle en defensa propia, dos arañazos de menos de seis milímetros y una mordida en el brazo izquierdo.
“Mi vida y el daño psicológico a mis hijas sólo cuestan 30 pesos cubanos de multa”, expresó en redes sociales Hernández, quien es conocida en ese ámbito por ser administradora, entre otros, del grupo de Facebook Recetas desde el corazón, con más de 130 mil seguidores en Cuba y otras partes del mundo.
Según explicó, con anterioridad el sujeto había violado la orden de alejamiento, de lo cual dio parte al Jefe de sector pero nada se hizo al respecto.
Medicina Legal determinó que las heridas causadas por él en todo su cuerpo, y una mordida y dos arañazos suyos, “estaban a la par en cuanto a gravedad”, afirma Dianelys, quien detalló que ella todavía se encuentra bajo tratamiento médico y sin que se le pudieran hacer el ultrasonido ni la mamografía hasta que bajara la inflamación en sus senos.
Agregó que 15 días después de ocurridos los hechos ella todavía tiene marcas y golpes visibles, nada de lo cual fue examinado en los seis minutos que duró su vista en Medicina Legal.
De acuerdo con Hernández, ni siquiera su abogado no la acompañó porque la iban a examinar y él no podría entrar, pero no hubo ningún tipo de examen.
La denunciante aseguró además que el Instructor del caso estuvo en contacto con el agresor en el propio departamento de Medicina Legal y par de horas después llegó a la estación con el caso cerrado y el mencionado aval sobre las heridas.
Para Hernández, si quien comete este tipo de hechos trabaja en lugares como el Minint o tiene relaciones, es posible que incluso los papeles desaparezcan o que se atormente a la víctima con trámites y más trámites burocráticos.
“Como funcionaria del Gobierno de la República de Cuba, siento total vergüenza de las escasas o nulas leyes que supuestamente nos deberían de proteger y la pésima ejecución de las mismas”, expresó.
Asimismo, instó a las mujeres a no quedarse calladas ante casos como este. “Cada voz cuenta, así como la mía”, dijo Dianelys.
