Conmoción en la prensa cubana por suspensión a última hora de evento deportivo

Fotos: CN360

Texto: Redacción Cuba Noticias 360

Decenas de periodistas y profesionales de la comunicación vinculados a los medios estatales cubanos estallaron en redes sociales tras la suspensión de último minuto del Torneo Nacional de Softbol de la Prensa, que iba a celebrarse en Holguín del 27 de septiembre al 1 de octubre.

El evento no se disputaba desde el 2018 y con esta edición se quería de retomar la frecuencia anual que siempre lo caracterizó, pero cuando la mayoría de los participantes se dirigía a tomar el tren que los trasladaría hacia la oriental provincia, una llamada de la máxima dirección del país dio al traste con los planes.

Aunque la Unión de Periodistas de Cuba (UPEC), entidad que organiza el torneo, así como otras voces de peso en la prensa cubana, optaron por el silencio ante lo sucedido, muchos periodistas con notable presencia mediática sí decidieron denunciar lo que muchos consideran una falta de respeto.

Uno de los primeros fue Boris Luis Cabrera, reconocido reportero capitalino y una de las voces más constantes en el seguimiento del béisbol cubano. El cronista del periódico Tribuna de La Habana manifestó desconocer los motivos de la suspensión, pero expresó sentir “una vergüenza muy grande con los colegas de Holguín y todas las personas, que durante largas jornadas, se esforzaron para garantizarlo todo”.

“Muy triste (por las razones que sea) para todos los miembros del gremio que durante todo el año no descansan en su labor y estaban entusiasmados por participar en su campeonato de solo unos días”, agregó Cabrera, quien desde hace semanas estaba dando una cobertura constante a la previa del evento que iba a celebrar su edición XXI.

Otro que no esperó mucho para plasmar su decepción fue el comentarista deportivo Alejandro Rodríguez, también una cara habitual en espacios televisivos como Ruta 10 o Aló Cubano. El que iba a integrar la nómina del equipo de Medios Nacionales, representativos de La Habana, calificó lo sucedido como “triste e incompresible”.

“Hay un momento en el año en que la prensa cubana se junta para jugar softbol. Pero la competencia muchas veces es lo de menos. El softbol de la prensa es el espacio para confraternizar, el momento que reúne a muchos profesionales de todo el país. Su participación es mucho más activa, popular y sincera que cualquier congreso”, escribió Rodríguez en su perfil de Facebook.

Y remató diciendo: “Esta vez nos dejaron con el bate al hombro. Obviamente hay situaciones que nos superan. Sólo me parece irrespetuoso con todo el gremio, después de tantos meses de preparación, después de asegurar y garantizar un evento, que un día antes se suspenda”.

Sin embargo, otros periodistas no fueron tan medidos en sus palabras a la hora de denunciar lo sucedido. Desde la provincia holguinera, Abel Castro Sablón reveló que la suspensión se debió a que “alguien de arriba no le pareció sensato”. 

En su explicación Castro expone toda su frustración: “Alguien que ni siquiera sabe el sacrificio ni las horas al sol que muchos hemos pasado para prepararnos, porque en la climatización de su oficina no da el sol, seguramente. Y dicen que no es sensato hacerlo. Creo que menos sensato es gastar recursos sin lograr nada. Pero para ir a New York o a Vietnam sí hay recursos y es muy sensato. De veras cada día se tienen menos razones para sentirse orgulloso de ser cubano, con seres tan sensatos”.

Otras personas en las redes ajenas al softbol de la prensa, alegaron que era una decisión lógica si antes se habían cancelado otros eventos deportivos de mayor peso como la Serie Nacional Sub-23. Sin embargo, es absurdo comparar un torneo que aglutina solo a 120 personas por cuatro días, con un campeonato de primer nivel que mueve a más de más de 500 jugadores de todas las provincias por varias semanas.

El Torneo Nacional de Softbol de la Prensa surgió a mediados de la década de los 90 y en sus primeras ediciones lo prestigiaban periodistas reconocidos del país como Eddy Martín, Rodolfo García, Modesto Agüero, Milton Díaz-Canter, Aurelio Prieto, entre otros.

Sus primeros años era organizado casi con recursos propios de los participantes, hasta que poco a poco la UPEC fue asumiendo su organización íntegra y a día de hoy no permite que se realic con gestiones individuales o personales, como también muchos miembros del gremio han reclamado.

Al final, lo más doloroso de esa arbitraria suspensión es que priva del único momento en el año de esparcimiento y confraternización a decenas de periodistas que son los que siguen defendiendo el sistema socialista y al gobierno cubano en los medios de comunicación. Que aprenda la lección, dirían algunos.