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Texto: Hugo León
Un informe dado a conocer este martes por el gobierno de La Habana cifra en casi mil 300 el total de viviendas con afectaciones en la capital cubana a causa del huracán Ian, pese a que el fenómeno meteorológico pasó por Pinar del Río.
Reinaldo García Zapata, gobernador del territorio, informó en el espacio televisivo Mesa Redonda que Ian dejó en la capital 38 derrumbes totales, 138 derrumbes parciales, 178 derrumbes totales de techos y 815 derrumbes parciales de techos.
Las cifras distan de los datos preliminares dados a conocer en la jornada después del paso del meteoro, que solamente ascendían a cinco derrumbes totales y menos de 70 parciales.
El elevado número de afectaciones sorprendió a los televidentes, pues La Habana no enfrentó la mayor fuerza destructiva de Ian, sino que el centro del huracán pasó por Pinar del Río, a más de cien kilómetros de la capital cubana.
García Zapata destacó que hasta el momento se habían reparado 30 casas y otras 34 están recibiendo restauración, y que el gobierno atenderá un grupo de viviendas dañadas, para lo cual se hizo un proceso de selección.
Especificó que las viviendas que se construirán por vía estatal serán principalmente las que tienen un nivel considerable de afectación.
De acuerdo con García Zapata, los materiales de construcción necesarios se situarán en las tiendas o rastros, para que los otros damnificados puedan construir o reparar sus casas con esfuerzo propio.
Para esto, el estado venderá los materiales e insumos a los damnificados al 50 por ciento de su precio habitual, de acuerdo con organismos de dirección del gobierno de la provincia y la Presidencia de Cuba.
La Habana resistió vientos de 80 kilómetros por hora y ráfagas apenas superiores a 120, muy inferiores a los que azotaron otros territorios occidentales como Pinar del Río, no obstante, el estado del fondo habitacional en la capital se ha deteriorado con el paso de los años.
En el mismo estado se encuentra una buena parte del país, pues de acuerdo con datos oficiales cerca del 40 por ciento de las viviendas de la isla están en regular o mal estado constructivo.
De momento, las nuevas viviendas afectadas se suman a los cientos de edificaciones que están pendientes de restauración total o parcial tras el paso de ciclones por la capital hace varios lustros, o el tornado de 2018.
Para los damnificados además de los subsidios mencionados, que llegan al 50 por ciento, se avecina el difícil reto de la construcción en Cuba.
