Foto: Cuba Noticias 360
Texto: Hugo León
Cinco años después de haber dejado la presidencia de Cuba y a dos de ceder el puesto de primer secretario del Partido Comunista, único legal en el país, Raúl Castro, una de las figuras históricas del poder en la isla desde 1959, volvió a ser nominado como candidato a diputado del Parlamento que se elegirá en marzo próximo.
Fue el 16 de abril de 2021, en las últimas sesiones del VIII Congreso del PCC que Raúl se despidió del cargo político, el más importante de la nación, con la idea de “cuidar nietos” y leer.
El exmandatario dijo que se retiraba “sin el menor atisbo de tristeza o pesimismo” y que mientras viviera, estaría con el pie en el estribo para defender a la patria, la revolución y el socialismo”.
¿Sigue siendo Raúl uno de los decisores del país?
Según el medio estatal Cubadebate, en una sesión extraordinaria de la Asamblea Municipal del Poder Popular en II Frente, Santiago de Cuba, se postuló a Raúl Castro para el Parlamento, como en todas las candidaturas desde que se adoptó el presente formato de elecciones de ese órgano.
Si bien los dos cargos más importantes de Cuba llevan el nombre de Miguel Díaz-Canel, sería ilusorio pensar que el ex presidente Raúl Castro es solo una figura del pasado.
Las claves para comprender esto las dio el propio Díaz-Canel al tomar el cargo de primer secretario del partido. En su primer discurso al frente de la organización, aseguró que Raúl siempre sería guía permanente para él y que “continuará presente porque es un referente para cualquier comunista y revolucionario cubano”.
Es cierto que desde 2021 por vez primera en 62 años no está el apellido Castro en el mando del país y que los analistas señalaron en ese momento que esto le dio más libertad de acción a Díaz-Canel y su gabinete, pero esos mismos analistas coincidieron en que el exmandatario cubano seguiría presente y siendo parte de la toma de decisiones en la isla.
El exdiplomático Carlos Alzugaray, por ejemplo, señaló que con Raúl pasaría lo mismo que con Deng Xiaoping en algún momento en China, cuando a pesar de que este no tuviera ningún cargo, todo había que consultarlo con él y él tenía la última palabra.
Si sucede lo mismo en Cuba es difícil -sino es que imposible- de saber, pero la permanencia de la generación histórica en altos cargos políticos y del gobierno, y su inclusión en la Asamblea Nacional del Poder Popular, confirma que su peso es real y mucho más que simbólico.
Díaz-Canel y otros funcionarios nominados
Si bien la nominación de Raúl pudo no ser esperada por algunos -pero más que obvia para la mayoría-, la lógica indicaba que otros nombres de sobra conocidos en el país también tuvieran el honor.
Así tenemos, por ejemplo, que el actual Presidente de la República y primer secretario del PCC Miguel Díaz-Canel ya resultó nominado este domingo como candidato a diputado a la Asamblea Nacional del Poder Popular (ANPP), por la instancia municipal de ese órgano en Santa Clara.
Otra figura clave del país a lo largo de décadas que ya recibió su nominación es el Comandante de la Revolución Ramiro Valdés Menéndez, quien a punto de cumplir 91 años es miembro del Buró Político, la más alta instancia de dirección del partido, y también Viceprimer Ministro de Cuba.
Asimismo, José Ramón Machado Ventura, también Comandante del ejército rebelde que cumplirá 93 este año y que ha estado durante casi medio siglo en las más altas esferas del poder en la isla, recibió su nominación.
El actual ministro de Economía y Planificación, Alejandro Gil Fernández, también resultó nominado, al igual que Joel Queipo Ruiz, miembro del Secretariado del Comité Central del Partido Comunista de Cuba (PCC) y jefe del departamento económico y el vice primer ministro de la República Jorge Luis Tapia Fonseca.
Y si leer los nombres resulta un tanto aburrido porque son casi los mismos de siempre, también deja mucho que desear porque sin un cambio significativo entre los elegidos, lo lógico es esperar que el cuartico se mantenga igualito.
